Las que me seguís desde hace tiempo, sabéis que me pierden los vestidos de tejido fluido, de los que vuelan al caminar. Son perfecto para cualquier boda, pero especialmente indicado para bodas en la playa o de estilo campestre donde apetece un outfit menos rígido.
Incluso jugando con sus tirantes y subiendo el talle, lo veo apropiado hasta en embarazadas.